En un reciente artículo, el Wall Street Journal citaba la opinión de miembros de la Open Data Initiative. Melanie Chernoff  explica en el siguiente post qué es y qué no es Open Data*

El artículo del WSJ  señala que la Iniciativa Open Data tiene como objetivo  ”ser más transparentes y dar a los consumidores un mayor control” de los datos que se recopila y se comparte. Proporcionar un mecanismo en el cual los consumidores pueden decidir qué información puede ponerse a disposición de los anunciantes es un objetivo loable. Sin embargo, esta iniciativa de  ”datos abiertos” se centra en los datos que se pone a disposición, cuando el tema es realmente acerca de cómo los datos se hacen disponibles. Este cambio de definición es un problema, especialmente para los gobiernos que están aplicando políticas de datos.

En pocas palabras, todos los datos abiertos están disponibles públicamente. Pero no todos los datos a disposición del público están abierto.

Abrir los datos no significa que un gobierno u otra entidad comunique todos sus datos al público. Sería inconcebible que el gobierno para dar a conocer todos sus datos privados y personales a cualquier persona que lo solicite. Más bien,  significa que todo lo que se comunica se hace de una manera específica para que el público pueda acceder a él sin tener que pagar tasas o ser injustamente limitado en su uso.

En un artículo anterior, escribí acerca de cómo la Massachusetts Bay Transit Authority (MBTA) abrieron sus datos de tránsito para los desarrolladores de software. Dentro de 2 meses, seis nuevas aplicaciones de planificación de viajes para los pasajeros de trenes y autobuses se habían construido sin costo alguno para la MBTA. Ese es el poder de los datos abiertos. Fueron datos producidos por el gobierno que fueron lanzados al público en un formato abierto (GTFS) de forma gratuita, en virtud de una licencia que permite para el uso y redistribución.

Si los datos abiertos se mal entienden como si fueran la liberación de los datos de todas y cada una de las informaciones para el público, la gente se opondrá a esa idea debido a su preocupación por la privacidad. Lo que nosotros, como defensores de la política, queremos fomentar es que los datos que los gobiernos deberían hacer y publicar es una forma de garantizar la igualdad de acceso público para todos los ciudadanos.

Todos hemos visto, por las noticias recientes acerca de Wikileaks, sobre la privacidad real y los problemas de seguridad relacionados con poner todos los datos del gobierno por ahí, pero que es un tema aparte y no debe confundirse.